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miércoles, 10 de febrero de 2016


Por Francis Frías Nagua, Republica Dominicana, 9 febrero 2016.- En el palacio de justicia de esta ciudad nos encontramos con José Paredes, quien denuncio que un sargento de la policía y un alcalde lo ultrajaron. Dijo que tanto el sargento de nombre Saúl y el alcalde Perales andaban borrachos y lo detuvieron cuando venía de trabajar agricultura. Comunitarios dijeron que el sargento Saúl se le pasó por encima a otro cuartel y llego hasta la comunidad Los Rincones del Guayabo y lo llevaron a un montecito y ahí fue que lo ultrajaron quitándoles los pantalones apretándoles los testículos. Enviaron un mensaje al jefe de la Policía Nacional para que este sargento sea investigado y de igual manera al alcalde Perales que se cree un Dios y que por eso el le da pescozadas a los ciudadanos. Indicaron los moradores que no es la primera vez que ven la camioneta de la policía llena de romo, por lo que en estas comunidades ese sargento pasa sus días borrachos. *Me encañono varias veces, me amarraron con un lazo y me dijo que tenía que hablar sino me iban a matar, entonces desde su comunidad se lo llevaron al cuartel de Arroyo Al medio y ahí pidieron mil pesos para poder soltarme y lo entrego un ciudadano de esa comunidad Juan Batista* Dijo. Dijo Paredes. Manifestaron preocupación porque ese oficial se pasa los días borrachos y que para poder tomar todos los días vive extorsionando los hombres de trabajo. Juan Batista quien es patrón de José Paredes indico que tuvo que pagar mil pesos en el cuartel para que dejaran en libertad al jornalero. *Después que sabían que veníamos para la justicia entonces me mandaron los mil pesos y le dijimos que se quedara con esos cuartos que eso es lo que el vale para la sociedad*. Dijo Paredes. Paredes presenta golpes contundentes en su muñeca izquierda, la frente, la nariz y en el costado derecho e izquierdo, así como también en las piernas. Los comunitarios califican esto como una falta grave que el jefe de la institución del orden no la puede tolerar. Hoy en la audiencia conciliatoria este reportero se enteró que fue burlado por el defensor del sargento y el alcalde ante la mirada indiferente de la fiscal adjunto actuante en este caso.
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